Los pequeños también sabemos comernos el mundo.

¿Desde cuándo vivir en el cielo se había vuelto tan difícil?
Que alguien me diga cuándo se dejó de soñar.
Y cuándo empezaron  cobrar a tan alto precio los deseos.
¿Cuándo se permitió a los ogros caminar por la calle con la cabeza alta y un buen traje?
Quiero saber el momento exacto en el que el mundo se ha vuelto una puta mierda y que, para todo, tengamos que pedir permiso.
Me niego rotundamente.
No me da la gana.
Soñemos mil y una cosas.
Pidamos tres mil dos deseos.
Que por pedir, nos concedan el mundo entero.
A nuestros pies y bien glaseado con extra de chocolate negro por favor.
Que se nos dé por hacer locuras sin ser juzgados porque todos harán lo mismo y nada resultará extraño.
Dejemos en paz las margaritas, deshojemos los árboles y demos patadas a las montañas de facturas que nos entierran tras el escritorio y que día a día nos sacan la vida.
Subámonos a la alfombra con las piernas cruzadas al grito de "Vuela alto Welcome"
Miremos sonrientes al sol, hasta que nos lloren los ojos porque tiene un brillo impactante.
Empujemos el viento que pretende llevarnos en sentido contrario, usemos las dos manos, para que ves que sí le hacemos frente y valla cediendo.
Que da igual que no sepamos soñar, que lo hagamos bien o mal, porque si nos lo pide el alma se da todo por bueno.
A ver cuándo coño aprenderemos, que el universo se cambia parpadeando de otra forma y que llorar también es algo bonito.

Comentarios

  1. Tienes mucha razon, me gusta tu bloog ! te espero en el mio cuando quieras, ojala me sigas asi no perdemos el contacto.. suerte !

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchisimas gracias, me pasaré por el tuyo
      Un besito.

      Eliminar

Publicar un comentario

Entradas populares